El papel para pintar cuadros se llama comúnmente papel de acuarela. Este es un tipo de papel especialmente creado para la técnica de la acuarela, que es una técnica de pintura en la que se utiliza una mezcla de pigmentos y agua.

Este tipo de papel debe tener suficiente cuerpo y absorción de agua, para que los pigmentos puedan mezclarse y difuminarse correctamente y no se formen manchas o parches en la superficie del papel. Además, el papel de acuarela debe ser resistente y duradero para soportar el trabajo de la técnica de la acuarela.

Existen diferentes marcas y tipos de papel de acuarela en el mercado, con características y texturas variadas. Los más comunes son los papeles de grano fino, medio y grueso, que pueden tener una textura suave o rugosa, y que varían en tamaño, desde hojas individuales hasta grandes blocs.